viernes, 15 de enero de 2010

LiveSimulcast: Continuidad VS Simultaneidad

En vivo y simultaneo.  Así describe la TV de hoy en día un programa que se esta realizando en un lugar determinado y que usted puede ser parte de él en el mismo momento en que se esta llevando a cabo. Esta tecnología satelital permite que sea en simultáneo, o sea, que ocurre al mismo tiempo que otra. Usted puede ver todo lo que esta pasando, en vivo y en tiempo real, mientras que esta en otro lugar realizando otra cosa.  Prácticamente es estar en dos lugares distintos al mismo tiempo.


Ese es el concepto que Jesús quiso sembrar en nosotros en Hechos 1.8: “me seréis testigos en Jerusalén, Judea, Samaria, y lo último de la tierra”. Por algún motivo cuando leemos este versículo a nuestra mente viene el pensamiento de algo secuencial, o sea, primero el numero uno, después el numero dos, después el tres y así sucesivamente. Este versículo lo interpretamos como: primero Jerusalén, luego Judea, después Samaria, y si nos da las fuerzas, lo último de la tierra.  Sin embargo lo que Jesús quería decir era LiveSimulcast! En vivo, todo al mismo tiempo! En mas de un lugar, haciendo una tarea, al mismo tiempo que otra.


Cuando pensamos en nuestro Jerusalén pensamos en lo siguiente: hay tanto trabajo aquí que me enfocaré a trabajar primero en este lugar y luego cuando haya acabado mi tarea seguiré adelante a otro lugar.  ¿Si siguiéramos adelante con esa línea de pensamiento cual seria el resultado? ¿Cuándo tiempo llevaría evangelizar persona a persona una ciudad como Miami con cuatro millones de personas? Llevarle el evangelio a cada uno llevaría no menos 20 años, y es muy probable que mi iglesia no pueda hacerlo sola, y que para el momento en que haya hablado a los cuatro millones, estos se hayan duplicado.


Jesús conocía esta realidad, por eso nos dijo que teníamos que cumplir con el rol de ser testigos, llevar el evangelio, todo al mismo tiempo.  Lamentablemente los discípulos se quedaron solo en Jerusalén, y Dios tuvo que permitir una persecución, en Hechos 8.1, para que el evangelio llegara a Judea y Samaria.


Hoy la situación no ha cambiado mucho, seguimos pensando que nuestra Jerusalén es lo mas importante, o a lo sumo, nuestro país de origen.  Sin embargo los grupos étnicos no alcanzados siguen sin conocer de Cristo porque hay una iglesia ocupada solo en su propia ciudad.  Mas de 100 años atrás muchos misioneros de Estados Unidos y del resto del mundo dejaron su Jerusalén, para ir hasta lo ultimo de la tierra: Latinoamerica, y gracias a eso nuestra realidad cambio.


Hay cerca de 6500 grupos étnicos no alcanzados sin ningún acceso al evangelio, y no lo son porque si, lo son porque a veces hay prohibición gubernamental, porque viven en lugares remotos, pero también porque no tienen acceso a Biblias, porque no hay creyentes entre ellos, porque no tienen misioneros. Una iglesia que va hasta lo ultimo de la tierra tiene la capacidad de estar cubriendo todo el radio de acción que Jesús ordenó, y eso nos bendice y bendice a las naciones. Su iglesia puede ser una iglesia comprometida con Hechos 1.8


¿Cómo su iglesia puede ejecutar un rol simultáneo?  

  1.               Haz del ministerio de misiones el ministerio central y propósito de la iglesia.  Que todo gire en torno a el. No lo tenga como un departamento mas. Así como evangelizar es un propósito de la iglesia, que lo sea también hacerlo en donde otros no tienen acceso al evangelio.  Haga que el cometido final de cada ministerio de la iglesia  desemboque en las naciones.
  2.             No separes evangelismo de misiones.  Las dos áreas van juntas, de la mano y complementadas.  Es bueno que quienes están envueltos en evangelismo entiendan que tienen un objetivo hacia lo ultimo de la tierra.  Es bueno que quienes están en misiones internacionales entiendan que su primer misión esta en la puerta de al lado.
  3.            Desarrolla una agenda equilibrada. Que su iglesia tenga trabajos misioneros en su ciudad, su estado, país, otra cultura distinta en su mismo país, y en grupos étnicos no alcanzados en lugares remotos. 
  4.              Dale a todos la misma importancia. Que su iglesia entienda que es tan importante el trabajo en casa como el de lo ultimo de la tierra, y viceversa.
  5.             Modela simultaneidad.  De el ejemplo. Invierta su tiempo y recursos en participar de proyectos misioneros en los cuatro niveles.  Con el tiempo su iglesia será inspirada a hacer lo mismo y estar involucrada en todas las áreas.

¿Necesita ayuda para ser una iglesia simultánea? hay muchos ministerios que podrán ayudarle a avanzar en ese desafío.   Uno de ellos es Comhina, la Cooperación Misionera Hispana de Norteamérica y Canada www.comhina.org y otro es Movilización Hispana de la IMB www.hispanos.imb.org. 


Conviértete en una iglesia simulcast!